Los grandes también se equivocan al especificar
Según informa el diario El País, España, la fachada del Palau de les Arts, en Valencia, obra de uno de los grandes de la arquitectura e ingeniería hispana, Santiago Calatrava, se está arrugando, tal cual la piel de los ancianos. Es el primer síntoma de una patología que acabará en lamentables desprendimientos del trencadís, sistema de recubrimiento compuesto por plancha de acero soldado en la base, mortero y cerámica pegada, según se indica en las especificaciones técnicas del proyecto.